El título de esta película “erotic fan service movie” incluye la palabra “liberadas”, aunque esto resulta sarcástico después de todo lo que vive su protagonista
No, no leí el libro, y tampoco vi las películas anteriores, pero en mi mente prevaleció la idea de dar una oportunidad para que Cincuenta sombras liberadas me sorprendiera, aunque sólo fue una obra que cumple la fantasía de un sector femenino que tiene un ideal del hombre perfecto.
Empieza justo donde se quedaron en la cinta anterior (según un resumen que me dio un amigo para entenderle). Ana y Christian se casan y esta historia trata de su vida post-matrimonio.
Ellos tienen una luna de miel de ensueño, mientras que en la sala de cine que me tocó la mayoría de las asistentes suspiraban; ahí se escuchaban comentarios como: “Ojalá me encuentre uno así”.
El drama llegó gracias a los asuntos sin resolver que dejaron en las cintas anteriores, sumado a la actitud de rebeldía de Ana “que no quería ser sometida”, pues esperaba conservar su vida de soltera independiente.
El resto de la película continúa con un estira y afloje de imposiciones y sometimiento marital, en algunas escenas se pudo apreciar cómo Christian (el señor Grey) le prohibe a Ana que haga cosas como salir con sus amigos y andar sola. Situaciones a las que la protagonista cedía.
Ante todo esto, al parecer, al resto de las chicas en la sala de cine lo consideraban como aceptable, pues se les oía decir: “awww que lindo, mira cómo se preocupa”.
La cinta muestra una idealización exagerada del amor incondicional que desencadena celos irracionales, y que además son romantizados.
Cincuenta sombras liberadas es una erotic fan services movie (como las de Golden Channel) pero con fotografía linda.
Los personajes y el drama son creíbles, pues por lo visto muchas mujeres esperan o ya están viviendo una vida como la que se mostró en esta película (tengan dinero o no).
Por las reacciones del público durante la función, asumo que es el cierre que esperaban para esta saga.
Lo rescatable del filme fue la elección de vestuario, siempre veíamos a Ana en atuendos impecables que hacían referencia a su reciente adquirida riqueza.
Admito que en algún punto esperaba que después de ver a su guapo jefe, Ana despertara y se diera cuenta que todo fue producto de su imaginación.
Conclusión: Si eres fanático de los libros, la saga o tu sueño es conseguir a un señor Gray, lo tuyo es esta película; si no encajan en ese perfil, absténganse e inviertan su dinero en otra cosa. Mejor les recomendamos ver las películas nominadas a los Premios de la Academia 90, por ejemplo.