Drake Bell regresó a Guadalajara como parte de una pequeña gira en la que también visitó el D.F. y Monterrey, aunque no era la primera vez que el cantante se presentaba ante el público tapatío, sin duda fue una de las más memorables.
Eran alrededor de las 9 pm cuando cientos de jovencitas gritaban esperando la salida de Bell al escenario, y cuando ésto finalmente sucedió, se desató la euforia. El proyecto musical de Drake Bell es una mezcla de rock pop y rockabilly que ha logrado hechizar a sus seguidores, en su mayoría jóvenes que no sobrepasan la mayoría de edad, pero a quienes Drake les entrega todo su talento y energía en cuanto se apodera de entarimado.
Tras algunas pequeñas fallas en el audio Bell ofreció un recorrido por los temas que conforman su discografía, desde Telegraph hasta Ready, Steady, Go!, su más reciente trabajo, en un verdadero derroche de talento, no sólo por parte del cantante, sino de la banda que lo acompaña en escena, quienes realmente han sabido capturar la escencia de la música de los años 50´s y 60´s.
Se dice coloquialmente que “El tiempo vuela cuando uno se divierte”, frase que se hizo evidente el domingo en el C3 Stage, y es que la energía que se transmitían el músico y sus fans mutuamente, parecía ir en aumento en cada tema y en cada trago que Drake daba a su botella de tequila. Tras casi cuatro horas de show, en las que el cantante realizó covers a temas de The Stray Cats, Johnny Cash e inclusó “La Bamba”, la fiesta parecía no terminar, y en un punto, invitó a un grupo de afortunadas fanáticas a compartir su entusiasmo en escena, donde algunas incluso se llevaron un beso del cantante como recuerdo de una velada inolvidable.
Lejos quedó la época del Drake adolescente que salía en TV, sin embargo el nuevo Drake, el músico, sabe perfectamente como ofrecer un gran show.
Fotografías de Noé Blanco para Kä Volta
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