Las uñas para verano 2025 se llevan como un accesorio más. Para dar personalidad a tu look en tonos y texturas que juegan entre lo onírico y lo pop.
Sí siempre traes la manicura hecha y estas buscando constantemente como te las vas a hacer pues este verano, las uñas dejan de ser un complemento silencioso y se convierten en un destacado. Desde brillos perlados hasta texturas esculturales y acabados difuminados. las uñas se transforman en un medio de expresión donde nos cuentan historias que huelen a sal, fruta fresca y libertad.
Dándote un spoiler, las tendencias de uñas PARA VERANO 2025 se alejan completamente del clean look (como todo lo que hemos visto este año en la moda). Ya no solo serán uñas sencillas de un solo color. Esta temporada se trata de jugar, de reinventar lo clásico, de mezclar lo natural con lo fantástico. Pero sobre todo, de dejar salir tu creatividad y lucir tu personalidad en tu manicura.
Uñas glaseadas
Las uñas efecto glaseado o “glazed nails” deslumbran este verano con su encanto discreto y su acabado de alto brillo que evoca el glaseado perlado de un postre de vitrina. Esta manicura, famosa por su efecto nacarado casi etéreo, evoluciona más allá del clásico nude tornasolado. Se renueva en versiones que capturan la luz de forma suave y sofisticada.
Este año, la tendencia se tiñe de color: lavandas empolvados, verdes matcha y azules celestes adquieren una dimensión opalina gracias al sutil toque cromado. También llegan al estilo francesa, con puntas perladas o bases glaseadas que modernizan la clásica manicura francesa. Incluso los detalles mínimos como micro estrellas o delineados en dorado líquido, encuentran su lugar sobre estas superficies brillantes como burbujas de jabón. Un efecto que mezcla limpieza, lujo y fantasía, ideal para quienes buscan uñas que hablan en susurros relucientes.
La fiebre de los lunares
Este verano, las uñas polka dots se reinventan con un aire juguetón y sofisticado que transforma el clásico lunar en una declaración de estilo. Lejos de los patrones rígidos, los puntos ahora flotan de forma asimétrica sobre bases lechosas, nude o pastel suave, como si fueran pequeñas burbujas gráficas suspendidas en el aire.
Se llevan en todos los tamaños (desde microdots casi imperceptibles hasta lunares XL). En combinaciones inesperadas: negro sobre rosa pálido, rojo con lavanda, e incluso metálicos dispersos sobre un fondo translúcido. La tendencia se mueve entre lo retro y lo pop, adaptándose a uñas cortas y largas por igual. Se mezcla sin esfuerzo con otras técnicas como el glazed o el negativo, creando manicuras con identidad propia pero sin exceso. Perfectas para quienes quieren un toque de arte en cada dedo, sin perder la frescura del verano.
La isla en tus manos
La hemos comenzado a ver desde finales del año pasado y llegan este verano como una entrada directa a una isla paradisíaca, sin necesidad de hacer maletas. Vibrante y sensorial se inspira en los colores de la fruta fresca, los paisajes tropicales y la energía despreocupada de un eterno atardecer junto al mar.
Tonos papaya, verde palmera, coral neón y azul turquesa se mezclan con motivos de hibiscus, hojas de monstera y degradados tipo atardecer. Crean una manicura que huele a coco y brilla como piel mojada. Para el 2025, las variaciones van desde el minimalismo tropical con detalles florales sobre bases nude, hasta versiones más audaces con efectos jugosos, acabados cromados o apliques 3D como conchitas y perlas. Perfectas para las que quieren que cada uña cuente una historia de sol, sal y libertad.
Uñas 3D
Las uñas 3D irrumpen este verano con una estética juguetona, divertida y escultural que convierte cada dedo en una mini obra de arte. Ya no se trata solo de color: ahora hablamos de volumen, textura y formas que literalmente emergen de la superficie.
Corazones inflados, burbujas perladas, lazos glossy y flores con efecto gomita se funden con una nueva ola de motivos orgánicos inspirados en el mar; conchas, gotas traslucidas, relieves tipo coral o lava derretida, ideales para un look entre sirena futurista y nostalgia caribeña.
La clave está en el contraste: una uña escultural se mezcla con otras más pulidas, creando un juego visual que es a la vez elegante y atrevido. Perfectas para quienes quieren que su manicura no solo complemente un outfit, sino que lo protagonice.
Francesa reinventada
La manicura francesa se sacude el polvo y se reinventa con una audacia veraniega que la aleja (por fin) del cliché clásico. Este diseño de uñas para verano 2025 apuesta por bordes ondulados, dobles líneas, acabados cromados y colores que van desde los pasteles helados hasta neones vibrantes.
El contraste entre lo minimal y lo maximal se vuelve protagonista: puntas descentradas, trazos irregulares, combinaciones mate y glossy, o incluso efectos 3D que lo hacen inesperado. La base también evoluciona: ya no es solo nude, sino que juega con degradados, transparencias o tonos afrutados. El resultado es una manicura con alma de clásico, pero actitud de verano atrevido.
Efecto aura
Las aura nails siguen en tendencia, como una de las uñas para verano 2025 clave. Se reinventan con una vibra espiritual elevada y un impacto visual que hipnotiza. Este efecto de difuminado suave que parece emanar luz desde el centro de la uña se reforman con combinaciones de color que van del lila empolvado al coral neón, como si capturaran emociones en estado líquido.
La técnica, que fusiona aerografía, esponjeado y capas translúcidas, se vuelve aún más sensorial con acabados glazed, detalles perlados o micro toques 3D que simulan burbujas de energía. La gran novedad: el aura invertido, donde la intensidad se concentra en los bordes para un efecto inesperado y magnético. Más que una tendencia estética, estas uñas son una forma de canalizar tu mood del momento con una elegancia etérea que no pasa desapercibida.
Efecto marmol-cuarzo
Las uñas efecto cuarzo o mármol canalizan la belleza de lo mineral con una sensibilidad moderna y sutilmente mágica. Inspiradas en piedras como el cuarzo rosa, la amatista o el jade. Estas uñas para verano 2025 capturan vetas difusas, capas translúcidas y texturas que parecen esculpidas por la naturaleza misma.
Con colores frutales como sandías luminosas, mango con toques dorados o uva con destellos irisados, que aportan un aire más fresco y veraniego. También llegan versiones en tonos tierra, verdes oliva y rosas empolvados que dialogan con el sol y la piel bronceada. ¿El giro 2025? Sutiles acentos en foil dorado, acabados glazed o contrastes mate que elevan esta manicura a un nivel joya. Una apuesta elegante, introspectiva y perfecta para quienes encuentran poder en los detalles suaves.
En resumen, todas las tendencias de este verano se pueden mezclar, combinar y adaptar para que reflejes tu personalidad.
Se trata de explorar, jugar y dejar que tus uñas hablen por ti: pueden ser tu moodboard emocional, tu souvenir de unas vacaciones soñadas o simplemente el detalle que transforma por completo un look. Las uñas este verano ya no son solo un acabado. Son actitud, humor, y un accesorio más que refleja tu vibra. | #KaVolta 🤍, por Valeria Ramírez.