El delicado brillo de las melodías de Belanova, se acompañaron la noche del viernes por la Orquesta Sinfónica Juvenil de Guadalajara. Esta combinación logró estremecer los corazones de los tapatíos que con gusto volvieron a recibir a la agrupación pop.

El escenario del Auditorio Telmex agrupó a la gran Orquesta Sinfónica Juvenil de Guadalajara, además de los tres protagonistas de la noche, Ricardo Arreola en el bajo, Edgar Huerta en los teclados y en un despampanante vestido dorado, la voz de Denisse Guerrero. Al pie de cada pieza de “Canciones para la Luna”, este álbum sinfónico del 2013, cada una de las melodías fueron replicadas. Para abrir la noche con ‘Tus Ojos’, seguida de ‘Niño’.

Para conmemorar un concierto inolvidable, la agrupación tuvo como invitado al regiomontano Chetes, para acompañar a la orquesta con su voz y guitarra en “Cada Que…” para continuar con ‘Me Pregunto’ uno de sus éxitos del 2002.

Un cocktail de sonidos, géneros, covers, invitados y viajes en el tiempo a lo largo de la carrera de los tres quinceañeros.  La mágica gala en colaboración de voces e instrumentos como los de Eddie Gómez, Radaid, Sofía Meyen, Chemín y Arturo Santillanes, para completar la simetría de las composiciones originales.

Una celebración digna de una investidura brillante cuyo significado de la elección en palabras de Denisse Guerrero fue: “Este vestido no tendría sentido de no ser por ustedes”. En agradecimiento al público tapatío que se reunió de nuevo a verlos.

El juego de pirotecnia adornó el escenario en cada momento cúspide, al compás de: ‘No Me Voy a Morir’, ‘Rosa Pastel’ y ‘Por Ti’ canciones para ser cantadas de pie.

La noche culminó con un grito intenso que reclamaba las canciones finales: ‘One, Two, Three, GO!’ y la declaración de la dulce melodía que ha convertido a esta agrupación en un estandarte de la música pop: ‘Baila Mi Corazón’.

Texto de Maya Cortés
Fotografías de Noé Blanco para Ka Volta

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