Seguramente tienes planes de playa, viaje, vacaciones en una palabra. Pero hoy en KÄ Volta deseamos poder darte otras diez actividades las cuales pueden ser una segunda, incluso tercera opción en cuanto al qué hacer en tu tiempo libre éstas vacaciones.
Toma pluma y papel mental, esperamos alguna sea de completo interés. Por cierto, no existe un orden o cuantitativo para cada punto de la lista, es meramente por memoria para recordar cada uno. Bon Appettite!
Estar contigo mismo.
De verdad, no quiero sonar depresivo, triste o algo así, meramente véanlo desde este punto. Imagina unas vacaciones dónde puedas disfrutarte de ti mismo en un ambiente cómodo, del color u forma que prefieras, natural ó artificial. Una bella cabaña al lado de un río, para ti y los animales tuvieras alrededor. Un “depa” en el último piso con azotea privada, dotaciones de snacks, música y videos al gusto. Una casita en un pueblito olvidado, dónde el primer contacto humano tuviera que ser por vehículo. No me desagrada.
Visitar a un ser querido en desgracia.
Situación la cual ya he sido participe de ella. No es bonito, ni agradable. Para ninguno. El postrado no desea su situación mísera, tormentosa, deseosa de encontrarse en otro sitio, disfrutando de su “tiempo”. El enfermo también sufre (sic).
Seguir con tus buenos hábitos
Si algo me es en verdad difícil en la vida, es continuar con esos grandes, buenos hábitos, tales como el correr, mantener un cierto régimen alimentario, etc.; y mandarme en la playa con los 500 tragos gratis que ofrece el All-Inclusive que la tía Chuchis y/o tu madre organizaron y que de verdad es lo que más aprovechas, junto con la gran barra de Bufete que tiene ya tu nombre en ella. Un clásico.
Convivir más con tu familia
Permítanme explicarlo. Cuando tienes una temporada sin verlos, ó deseas abrazar a tu gente por el mero momento de deporte que éste constituye, lo sé. Pero cuando vives con ellos, o convives a diario con ellos, dudo que alguno de nosotros estemos realmente ansiosos de buscar el momento. Simplemente sabes estará allí, de un modo u otro.
Pero si se permiten vivirlo, seguramente valdrá la pena, se los aseguro. Al menos para mí.
Orar
Ésta preciosa actividad tiene que ser separada de su hermano obeso, tonto y pederasta, la religión. Pues la espiritualidad y la religiosidad son cosas diferentes. Y tristemente, pocas veces se usan en el mismo asunto y momento. Pero si logramos entablar una nueva y/o buena conexión con algo más que nuestros instintos y deseos, habremos hecho algo para recordar. Es todo.
Cuidar de alguien más
“Enemigo: Mi sobrinito.”, esas fueron las palabras con las que un muy buen amigo mío describía para mí, sus últimas vacaciones de invierno. “Solamente me la paso buscándolo, salvándolo, ¡evitando se parta la madre pues! ¡Chingado!”. No sonaba como un tipo feliz, cuya víspera navideña estuviera llena de alegría. Al parecer, ese niño le robó la emoción navideña. Todo un desalmado, de verdad.
Estudiar
¿Tienes algún examen súper importante, algún proceso de admisión riguroso, una aplicación de trabajo difícil? Lo entiendo y hasta aliento. De otro modo, ¡Cómo carajos te explicas que alguien se mantenga estudiando cual horario y momento usual de vida! ¡Ah sí, claro! La gente dedicada, u exitosa del mundo. ¡Demonios! (sic).
Hacerse una chaqueta…
Ok, ok. Lo entiendo (seguramente si lo harás). Se me estaban acabando las ideas con ésta (sic).
Vivir y trabajar para el zoológico
Un Conocido mío, me conto acerca de sus vacaciones donde un grupo de amigos y él se lanzan a cierto lugar y en el zoológico ellos trabajan ahí, se encargan de las labores usuales, aprenden de los animales, duermen ahí. Y pagan por la experiencia. ¡Eso es buen marketing del zoológico!
De verdad absolutamente NADA…
Literalmente morir en un sillón, solamente moverse para ir al baño y tomar otra posición para dormir incluso ahí. Debes tener un gran videojuego de por medio y cero ganas de estar con alguien, una gran ruptura amorosa y cero ganas de estar con alguien, o estar consumido en gran grado por las drogas de las cuales abusaste en su momento y cero ganas de estar con alguien.
¡Eso es todo, campeón!