Nunca fui buena para las plantas, todas se me morían… O al menos eso pensaba hace algún tiempo cuando ni por error me habría imaginado dedicarme a la cocina, y mucho menos a producir vegetales en casa
No hablo de que uno deba de tener un gran espacio para lograr producir vegetales en casa, pero sí se requiere algo de paciencia. Como muchas principiantes, yo me fui con la finta de comprar semillas en bolsita de esas que parecen súper pro ya fuera del súper o de lugares donde me llamaran la atención. Después de todo, ¿qué tan difícil podría ser? Pensé. Gran error.
Por: Miss Plaquetas, @missplaquetas
Pues si me preguntan, esas bolsitas se me hacen como las cajas de harina para pasteles ya preparadas que venden en el súper. Nomas no. Si van a comprar semillas para producir vegetales en casa, asegúrense de que sea un lugar adecuado tipo donde vendan plantas o mejor, un invernadero. Con gente que produce y que por lo tanto, sabe del tema y les aclarará sus dudas. Hay muchos que te ven la cara con tal de vender, y si caes, terminarás con la mala experiencia de no tener lo que buscabas y gastarás al doble. Dicho eso, al punto.
Producir vegetales en casa
Como yo cometí ese error, dije ok, la cagué. Ahora qué hago. Un día viene mi madre y me dice que casi todos los rabitos y semillas que uno tira después de limpiar las verduras y/o frutas a la hora de cocinar, son ideales para lograr crecer eso mismo. Y de pronto, ¡tarán! Jitomate, cebolla, epazote, verdolaga, acelga, manzanilla, ajo, limón y hasta una papaya aparecieron en mi patio trasero.
Por experiencia propia, yo les aconsejo lo natural: semillas de jitomate, dan jitomate; el rabo de la cebolla con germinado, da cebolla; lo mismo para el ajo; las raíces del cilantro, epazote y demás hojas verdes, sirven para plantarse y darse. Suena muy obvio, ¿verdad? El tip aquí es usar buena tierra, algo de abono o vitaminas, agüita de vez en vez, algo de sol, un poco de sombra, mucha paciencia, hablarles bonito y bam, la magia sucederá.
No les cuento de la alegría que se siente cuando uno ve su primer jitomatito germinando. Y mejor aún, la lana que te ahorras porque lo que antes comprabas, ya lo estás produciendo tú mismo en casa. Se lee súper padre, ¿no?
Honestamente, aún le estoy aprendiendo a esto de la producción hogareña. No sé mucho sobre estaciones, pero si se dedican a ir al mercado por lo menos una vez a la semana como yo, sabrán que es lo de temporada y eso les ayudará a darse una idea de lo que se puede producir en esa época del año. Ojo, mercado igual a saber que se da cada temporada. No tengo nada en contra del súper pero ahí encuentras de todo, todo el año. No cuenta.
Sobre el espacio, hay muchas ideas para implementar y acondicionar nuestro hogar. A nuestro favor tenemos el internet a la mano que puede fungir de inspiración. Yo, por ejemplo, quiero usar próximamente guacales para eso, cosechar papa, zanahoria y más. Y usar hasta las paredes de mi patio para colgar macetitas y seguir experimentando con otras cosas.
La idea es que uno se animen. Si te decides, ya la llevas de gane. Se los dice alguien que tenía fama de mata-plantas y ahora tiene más de cien en casa. Y quiere más.
– Miss Plaquetas.