The Kooks, la banda inglesa liderada por Luke Pritchard, presentó en Guadalajara su más reciente material de estudio titulado Listen, en una noche dorada y con incrustaciones de diamantes.
La noche prometía ser de calidad, con un Teatro Estudio Cavaret que a sus alrededores recibía público a montones, la banda prodigio de Brighton, Inglaterra, se hacía presente una vez más en la ciudad.
The Kooks está en la zona, y salen con una puntualidad característica de los británicos: siendo las 9:00 p.m. abren fuego al son de ‘Around Town’, con todo el ritmo que contiene el tema, y así la fiesta inicia.
Entre, bailes, gritos y todo tipo de peticiones, The Kooks muestra su presencia y calidad en el escenario, para proseguir con ‘Ohh La’, uno de los temas más icónicos de la banda, con lo que reflejan que su presentación no se guardará nada.
‘Bad Habit’ termina por conectar a la banda con el público en su totalidad. El Cavaret apoya a Luke, Hugh y demás integrantes de la banda que en el inicio de dicho tema coreaban “¡Oh, oh oh!”. ‘London’, ‘She Moves In Her Own Way’ y ‘Dreams’ dan continuación al show. Una pieza tras otra, mientras los seguidores en éxtasis total corean cada uno de sus temas.
La banda abandona el escenario a excepción de Luke, quien queda solo con su guitarra para interpretar ‘Seaside’. En el escenario parece un solitario trovador con su guitarra y voz como únicos artefactos, pero la calidez de los tapatíos hace que cada estrofa suene con una gran intensidad. El calor que hacía dentro del foro pasó a segundo término. La banda y sus seguidores estrecharon una conexión poco usual.
La banda regresa y lo hace con ‘Westside’, la cual pone a bailar a todo el inmueble con ese sello característico de The Kooks, entre Brit Rock, Pop, y guitarras muy Funk. Sin pausas llega uno de los momentos de la noche: ‘Always Where’ llena de júbilo el lugar, todos cantan y bailan uno de los mejores éxitos de la banda, en el cual Hugh Harris muestra su gran calidad como guitarrista al interpretar el solo con gran virtuosismo. No dan descanso a sus fanáticos y dos temas después eligen ‘Sway’ para que la conexión y espectáculo de la noche no se vean mermados.
Tres temas más la banda llega a ‘Forgive And Forget’, la cual deja espacio para ir a su encore después de una hora y quince minutos de una increíble presentación. Con ‘See Me Now’ y ‘Junk Of The Heart’ ligadas para no perder ritmo, The Kooks regresa a redondear su noche, la cual sería cerrada con broche de oro e incrustación de diamantes. No podría ser otra: ‘Naïve’ es la encargada de despedir un concierto espectacular en el cual se confirma la evolución de The Kooks y ese sello característico que, pese a su radical cambio, sigue siendo de mucho agrado para su público.
Texto: Salvador González Rico – @sgr_94
Fotografías de Noé Blanco para Ka Volta