Llegamos al Teatro Diana a eso de las 8 de la noche, para enterarnos que el evento era ya un Sold Out. Ni un solo ticket en taquilla, y si, mucha gente afuera.
Tras la actuación del grupo Okills, quienes abrieron el concierto, enfundada en un vestido corto rosa de flores de tela y un hombro descubierto, cerca de las 9 de la noche salió Mon Laferte, bajo la luz de un reflector rosa que creó un ambiente para enamorar a sus fans.
Escuchamos en más de una hora concierto canciones como Flor de Amapola, Igual que Yo, Lo que Pido, Orgasmo para Dos, de su segundo disco “Tornasol” y Diablo, Amor Completo, Tu Falta de Querer, Salvador, Si Tu Me Quisieras, éstas de su último disco Mon Laferte (Vol.1).
El público estaba en éxtasis, y se levantó de sus butacas para acercarse más al escenario, mientras Monserrat bailaba cual vedette de burlesque.
Después de la salida de Mon, y una corta espera, pasadas de las 10:30 sale al plató Caloncho, quien desde un inicio buscó encender el ánimo del público. Era muy notoria su emoción por pisar el Teatro Diana por primera vez. Creo que para quienes presenciamos el conciertos fue un deleite, incluso para él, quien no paraba de agradecer a los asistentes; a quienes poco a poco iba complaciendo entre tanto le gritaban desde el fondo del recinto “La Chora”, “Palmar”, “Chupetazos”… Hizo también suya, a manera de homenaje “Loco”, melodía que canta junto a Siddhartha.
Luego acapella Caloncho entonó: “mirame, mirame, quiereme, quiereme, besame morenita, que me estoy muriendo por esa boquita, tan jugosa y fresca y tan coloradita.”
Ambos artistas trajeron sus respectivas bandas en vivo, para recrear un sonido muy placentero y ad-hoc al escenario el cual creo que fue muy bien aprovechado.
Pocas veces puedes ver cómo los fans se desviven por cantar las canciones – completas – de sus artistas, sobre todo cuando estos cuentan apenas con un par de discos en su historial y equivalente número de sencillos, sin embargo era claro que quienes presenciaron este concierto en definitiva son fanáticos – de los de verdad – tanto de Mon Laferte como de Caloncho.