Aunque he visitado distintos estados de la república, algunos de ellos repetidas veces para visitar a familiares lejanos, Colima se ha ganado un lugar en mi corazón desde muy temprana edad, no puedo evitar sentirme en casa cada que entro a su capital.
En este artículo no pretendo decir que conozco cada rincón del estado pero si estás pensando que Colima es solo una ciudad de paso antes de llegar a Manzanillo y que debe ser aburridísimo hospedarte más de un día en ella no tienes idea de todo lo que te estás perdiendo; te presento entonces una lista que espero sirva también como checklist para un viaje de fin de semana.
Si decidiste llegar a Colima por la tarde-noche deja que Villa de Álvarez te dé la bienvenida, en la plaza principal están “las paletas de villa” y estas servirán para aclimatarte al caluroso clima de la ciudad, cabe mencionar que en la plaza hay tres poképardas y de noche han acostumbrado poner cebos en cada una de ellas, cuando termines tu paleta pregunta dónde cenar “sopitos”, la cenaduría está a dos cuadras y podrás disfrutar de un platillo tradicional de Colima, como advertencia, las enchiladas son dulces en este estado.
Vale la pena comenzar muy temprano el día siguiente ya que irás camino a Comala, pero primero toma el verde camino de la derecha hacia Nogueras, ahí encontrarás el Museo y Estudio de Rangel Hidalgo y el Jardín Botánico de Nogueras; después de visitarlos puedes regresar hacia Comala y estacionarte donde encuentres lugar, en la primera panadería que ves a tu derecha te recomiendo bajes y apartes la cantidad de empanadas y conchitas que desees pues el pan empieza a salir por la tarde pero se acaba en dos segundos.
Si tienes suerte y el día está despejado te recomiendo seguir por la carretera hasta la Laguna Carrizalillos donde se encuentra la mejor vista hacia el volcán, si el cielo no está a tu favor puedes ir a comer a Suchitlán, pueblo de brujos, aunque según la gente ya solo existe uno pues era una práctica que se pasaba de generación en generación.
No te pierdas la Zona Mágica que existe en este camino y disfruta de la ilusión óptica. Una vez que has comido y tomado mil fotos para tu Instagram regresa a Comala, recoge tu pan y compra un litro de ponche, primero prueba todos los sabores que quieras a menos de que vayas a conducir, mi favorito es el de cajeta con nuez.
El siguiente día está concentrado en la capital, comenzaremos por la zona arqueológica “La Campana” antes de que nos dé el sol, esta zona arqueológica está sobre Av. Tecnológico, a unos metros de un Walmart, es un recorrido corto pues a la zona le falta trabajo pero es bonita y puedes visitar una tumba de tiro, después nos adentraremos hacia el centro para visitar el Parque Regional de Colima, este tiene dos museos, un tianguis de artesanías y un pequeño zoológico. Antes de regresar a Guadalajara recuerda deslizarte en la Piedra Lisa pues se cree que solo quienes se deslizan por ella volverán a visitar Colima.
Si visitas Colima no olvides compartirnos tus fotos utilizando el hashtag #KaVolta, ¡buen viaje!