“Todos piensan en cambiar al mundo, pero nadie piensa en cambiarse a sí mismo”, Alexei Tolstoi (1882-1945)
El cambio constante, que va acompañado de sorpresas, momentos felices y agrios, se muestra en el nuevo trabajo de Café Tacvba que fue lanzado en mayo de 2017. Jei beibi muestra una evolución y un crecimiento de estos cuatro músicos que por décadas se han caracterizado por ejecutar un trabajo excelso, que ha dejado huella en la música pop y rock de México.
Aquí se encuentra el mismo estilo de rock que caracteriza a la banda de Ciudad Satélite, pero además se emprende un viaje musical por diferentes eras, géneros y momentos personales. Éste álbum ofrece un collage de sentimientos, ritmos y sabores auditivos.
Es con canciones que varían desde un 8-bit song digno de cualquier juego de NES, algo de música andina llena de misticismo y sabor, hasta una clase de reggaetón o dance hall, los cafetos destacan con una propuesta que destaca.
A través de los trece temas que contiene su nueva producción probaremos diferentes enfoques musicales, visiones que nos brindan una oportunidad de reconocer y hasta vivir experiencias específicas.
Jei beibi es una invitación a ahondar dentro de nosotros mismos y de la música misma.
Deseo hacer un paréntesis para comentar una bella pieza del material llamada “El mundo en que nací”, que es una honesta y abierta carta padre a hijo, en la que se expone el sentir, miedos y dudas que cualquier progenitor puede tener ante su descendencia.
De éste modo, Café Tacvba asegura a su público una gran compra de su producto, que está lleno de profesionalismo, calidad y un viaje nada estático, pues en éste hay cambios y sorpresas, así como la vida misma.
Esta placa discográfica es mera honestidad hecha arte, pues un artista debe de exponer sin límites de géneros o estilos musicales, personalidades y debilidades.