– “Hoy llegó mi periodo.” Aún en nuestros días decir algo así, tan abiertamente es difícil y hasta reprobado por algunos
Decir que estás en tu periodo es considerado cosa de asco. Es un tabú. Es algo de lo que no se debe hablar. No solo por la repulsión que causa imaginar un sangrado genital que puede prolongarse por 5 días. Tampoco trata del olor, ni al malestar, es simplemente condenado al silencio porque es de mal gusto.
Cuando era joven recuerdo que lo teníamos que ocultar. Los compañeros de la secundaria no debían saber que ya tenías la regla. Y a quien menos se les debía decir era a los hombres. Aun cuando se notara que tu cuerpo ya era diferente. Se lo podías decir a las mujeres grandes o a las compañeras mayores. A las que podían comprenderte y/o darte una aprobación o status de adulto.
Me pregunto si uno no decía que ya tenía el periodo como una forma de evitar o salvarse de un matrimonio siendo tan joven. Porque “la regla”, era de que a partir de que iniciara la menstruación sería momento de casarse por que ya podías tener hijos, tuvieras la edad que tuvieras.
También recuerdo que en algún punto un poco mayor, tener que comprar toallas sanitarias era igual o peor de tabú que comprar condones o anticonceptivos. Había lugares que hasta te entregaban tu mercancía en una bolsa negra o de papel, junto a tus otras compras en bolsa normal. Si quien empacaba era mujer te preguntaba, otras era sobreentendido. Una complicidad que si me preguntan a mí, era más mal sana que otra cosa. ¿Por qué ocultar algo natural?
Conforme al paso del tiempo me di cuenta que no tenía por qué sentir vergüenza. De alguna manera se sabe sobre la existencia del periodo. Aunque es claro que para algunos la información es apenas básica. Hoy día no veo razón alguna para ocultarlo, sentir pudor o repugnancia hacia él, salvo el natural que siente quien lo está viviendo o si no te gusta o te impacta ver sangre.
Así que creo que cualquier mujer puede decir en cualquier momento, sin tapujo ni la mayor pena: “Hoy llegó mi periodo”.
Para esta ilustración, que es la original, solo alteré los colores. Recuerdo que la inspiración principal eran estas lámparas de lava que se mueven de arriba a abajo. Recuerdo que me inspiré en ella porque a veces así se siente por dentro el periodo como un constante movimiento y burbujeo. | #LunesEnTacones, @anavolta