Recientemente pasé mucho tiempo bajo el sol cubriendo dos festivales de música para Kä Volta: El Akamba y El Corona Capital 2022. Aunque muchos de mis amigos no me crean, fue mi primera experiencia con festivales de música.
Claro, he ido a otros festivales donde la música estaba involucrada, como el Festival de la Cerveza 2019, o el Fire Fest de este año en el que hubo un buen de carne asada. Estas actividades usualmente involucran pasar largos ratos bajo el sol, acechando una sombrita que te proteja de sus poderosos rayos. A veces esa sombrita ya está siendo ocupada por alguien más, y no tienes otro remedio más que sentarte cerquita, y acercarte lenta y dolorosamente hasta estar incómodamente junto a ellos. (Ah. ¿Nomás yo? Ok.)
Probablemente no puedan descifrar esto de leerme, pero mi complexión es mucho más blanca que mi apellido. Más de una vez he sido víctima del chiste “¿Moreno? ¡Pero si estás bien güero!” y cuando voy al Mercado San Juan de Dios y gritan “Pásele, güerito” sé que inequívocamente se refieren a mí. De hecho, “Güerito” es el apodo que me pusieron desde bebé en el rancho de San Luis Río Colorado, Sonora donde nací. Todo esto les hará saber que el sol es un antagonista real en mi vida, aunque uno al que no le pongo gran atención.
Así es que el pasado Sábado 14 de Mayo me di cita en el terreno de Tequila, Jalisco donde se llevó a cabo el Festival Akamba sin una gota de bloqueador solar en mi mochila. El sol estaba en su punto más alto a eso de las 3:00 PM, y después de una hora empecé a preguntar en los puestos de atención médica si contaban con bloqueador. Era muy temprano, así que no encontré a nadie que supiera dónde conseguir el blancuzco elixir de la protección solar. Por fortuna, una amable señora estaba atendiendo un puesto en el pabellón de… ¿el pabellón de venta de productitos? No recuerdo que haya tenido nombre. La tienda en cuestión tenía una pequeña variedad de cremas disponibles.
– “¿Tiene bloqueador?” pregunté con un tono de urgencia.
– “Si, joven. De hecho esta de aquí es bloqueador”, la señora apuntó a una botellita con una etiqueta roja que en letras muy chiquitas decía “Bloqueador 50 SPF”
– “Estoy interesado” dije “En comprar una de esas botellitas”.
Y vaya que lo estaba, ya que empezaron a llegar más y más personas al puesto buscando muy seguramente lo mismo que yo. Me imagino que a la señora le fue muy bien ese día. Mientras me untaba el escudo protector en la cara, debajo de los ojos y en el cuello, pensé “No ma, debería escribir un Tengo Preguntas sobre qué hace el bloqueador” y bueno, aquí estamos. Bienvenidos.
¿Por qué usamos bloqueador solar?
Cientos de miles de años de evolución han hecho que seamos dependientes del sol en varios sentidos. La luz solar nos ayuda a producir vitamina D, la cual nos ayuda a retener calcio y fósforo, claves en la construcción de huesos fuertes. Estos rayos también definen nuestros hábitos de sueño, para que podamos estar despiertos de día y dormidos de noche. El sol incluso afecta nuestro humor, y en invierno en algunos lugares es común que las personas sean propensas a una depresión conocida como trastorno afectivo estacional por la falta de él.
Sin embargo, estos rayos también pueden llegar a dañar nuestra piel. Como aprendimos cuando hablamos sobre los colores del atardecer y sobre cómo se fabrican los colores, la luz del sol se conforma por muchas ondas. Algunas de estas ondas son las que rebotan de las superficies, haciendo que percibamos los colores, y otras son invisibles al ojo humano (pero no para otros seres como las abejas). Las ondas que nos interesan ahorita se conocen como “Rayos Ultravioleta” o rayos UV, los cuales se subdividen en UV-A, UV-B y UV-C. Los rayos UV-C son los que más daño hacen, pero son casi completamente absorbidos por la atmósfera. Los rayos UV-B son los rayos que hacen que nos quememos bajo el sol.
Nuestra piel, por supuesto, está preparada para contrarrestar los efectos de esta luz sobre nuestra piel produciendo un pigmento llamado melanina. La melanina protege nuestra piel del sol en la capa externa de nuestra piel, pero no todos tenemos la misma cantidad. Mientras más melanina hay en tu piel, más oscura es. Cuando alguien se va a broncear, lo que hace es forzar la creación de melanina de forma controlada para darle a su piel un tono más oscuro. El bronceado se quita cuando la piel produce nuevas células que reemplazan a las anteriores.
¿Qué nos hace el sol en exceso?
Para aquellos que no tenemos tanta melanina en nuestra piel, la exposición a los rayos del sol puede ser peligrosa. Cuando nos exponemos a radiación UV, nuestra piel está en un constante estado de reparación, pero esto no dura para siempre. Mientras más nos exponemos al sol, más envejece nuestra piel. Después de mucho tiempo de exposición (por ejemplo si trabajas largas jornadas en el día) tu piel puede volverse dura y arrugada, aparte de que se incrementa el riego del cáncer de piel.
El cáncer de piel sucede cuando los rayos UV causan daños al DNA existente en las células de nuestra piel, causando una mutación. Mutaciones como esta son generalmente encontradas y eliminadas por nuestro cuerpo, pero de vez en cuando pueden crecer demasiado rápido y causar que se desarrolle un tumor o lesión. Estos tumores pueden ser cancerígenos o benignos, dependiendo del caso.
¿Cómo nos protegemos del sol?
Para contrarrestar los efectos del sol sobre nosotros, primero que nada es importante limitar nuestra exposición al mismo. Si no es necesario, no debemos pasar mucho tiempo expuestos a los rayos del sol. Si ya de plano tenemos que estar ahí un rato (porque estamos cubriendo el Akamba o algo así) entonces es importante usar protección solar, de la cual existen dos tipos:
El protector solar (o Sunscreen en inglés) absorbe los rayos del sol y se considera una defensa química. Al aplicarlo es absorbido por la piel y nos ayuda a procesar de forma más saludable los rayos del sol. Sin embargo, no se recomienda su uso en personas que tienen la piel muy sensible.
El bloqueador solar ( o sunblock en inglés) se aplica sobre la piel y actúa como un escudo que refleja los rayos del sol. Esto lo logra por medio de compuestos como el óxido de zing o el óxido de titanio. La forma más fácil de diferenciarlo del protector solar es el hecho de que se vuelve opaco cuando se seca, como cuando ves a alguien con la cara blanca. Muchas alternativas comerciales de cremas para el sol incluyen ambos tipos de protección solar.
¿Qué es eso del SPF?
SPF significa Sun Protection Factor ( en Español, Factor de Protección Solar) y es un indicador de qué tan bien te puede proteger ese producto de los rayos del sol. Ninguna protección solar es perfecta, así que el número de SPF te dice qué tanto tiempo retrasará los efectos del sol sobre tu piel. Por ejemplo, un producto con SPF 30 significa que retrasa los rayos del sol 30 veces lo que duraría normalmente. Si te quemas normalmente en 1 segundo, el bloquador hará que te quemes en 30 segundos. De acuerdo a la Skin Cancer Foundation, un producto con SPF 30 sólo deja pasar el 3 por ciento de los rayos UV, y un producto con SPF 50 sólo el 2 por ciento.
¿Qué se recomienda generalmente usar?
Buscar un bloqueador solar con el SPF más alto que se pueda es generalmente la regla. Hay líquidos para broncear que tienen un SPF bajo para que la piel desarrolle la melanina lentamente, sin embargo si tu meta es protegerte hay que buscar un SPF de 50. La resistencia al agua también es importante si piensas entrar a la alberca o a la playa. Generalmente los que dicen “Sport” son resistentes al sudor y al agua, aunque esto no es una regulación oficial. Hay bloqueadores que dicen “Amplio Espectro.” Esto significa que bloquean tanto los rayos UV-A como los UV-B.
Así que, la próxima vez que andes buscando un bloqueador, lee la etiqueta y busca que incluya todas estas cosas para que no te falle jamás. Me complace anunciarles que después de comprar el bloqueador solar en el Akamba, lo usé frecuentemente a través del día y no me quemé en absoluto, lo cual fue un muy grato resultado. Incluso me lo llevé el siguiente fin de semana al Corona Capital y tampoco me quemé. Ustedes también cuídense mucho para que los podamos tener con nosotros por mucho tiempo, ¡y para que me puedan hacer preguntas que quieran que conteste en esta columna! | #TengoPreguntas, #KaVolta 🖤