Siglo XXI, Siglo XXI ¿Alguien me escucha ahí dentro? Nancy, por favor, necesitas tener un plan de vida, déjate de vida, un plan financiero. Piensa que si pierdes un amor otro llegará.
Si pierdes el trabajo luego conseguirás otro, ese no es el tema. El verdadero tema es que dejes de pensar que la solución a tus «problemas» sea encontrar a tu próximo marido. Ya pasaron casi dos años de tu separación y lo único que has acumulado son decepciones amorosas. No, mujer, no y no. Despierta. Mírate en el espejo, ¿Qué ves? No, la panza no, o sea sí, pero no eso ahorita no. Eres una mujer completa, un ser completo. No eres la media mitad de nada, ni de nadie. Estás completa con tus dos brazos, dos ojos, una boca, una nariz, dos piernas, veinte dedos chuecos, pero veinte y lo más importante: UN CE-RE-BRO, nena úsalo.
No te desmayes, respira, respira, respira y piensa todas las cosas que tú solita has hecho ya en este tiempo de soltería. Recapitula todas las ventajas que tienes al estar soltera. Tienes tiempo para hacer lo que te dé la gana sin pensar que tienes que llegar a cocinar la cena o lavar la ropa. Te ocupaste de todo menos de tus finanzas y recuerda que no hay amor más sincero que el amor al dinero… ¡NADA, NADA! No mientas por convivir, si piensan que eres una interesada, una ambiciosa, piensan bien porque lo eres y no tiene nada de malo. A ti te gusta la buena vida, vivir tu vida como Marc Anthony, genial porque te las has pagado tú. Desde ahorita ya vas a dejar de salir con puro patanete pobretón y quita tiempo de esos que en los tacos se enchilan y te preguntan si traes para un agua porque no sacó del cajero mientras tú piensas «¡Ay ajá!» pero no se lo dices, sonríes, asientes y terminas pagando.
No, ya, eso se acabó. Desde ahorita agarras la libreta y te me pones a escribir mugrero en el gastas/inviertes. En este momento que estás en tu más reciente etapa de Barbie Desempleada te vas a organizar financieramente, vas a dejar de ser la versión Barbie Pobretona Mental que has sido con las ideas de tu abuela (Q.E.P.D.) con aquello que reza: «Encuentra un buen hombre y quédate en tu casa» ya pasaron algunos años y efectivamente has encontrado hombres buenos para nada porque una cosa es pagar los tacos, pero otra es perder miserablemente el tiempo.
No tú ya no estás para perder el tiempo, querida, estás para hacer dinero, para vivir en plenitud tu ambición, tu interés, tus netas y ya si en el camino te encuentras a Mr. Useful pues ya verás, pero ahorita te me pones a hacer las cuentas de cuántas guineas tienes, cuántas quieres. Suma, financieramente desorientada, suma que la renta, el super y todas la croquetas que se comen Chuchú y Guapo no se pagan con las ilusiones de tu próxima e imaginaria boda.
Persignate y en el nombre de Virginia Woolf ahorra para tu habitación propia.
¡Bonito fiiiiiiiiin!
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